El Ayuntamiento de Santa Eulària des Riu ha finalizado las obras de reparación y mejora de la seguridad en el Camí de Can Carlos, ubicado en la Parròquia de Jesús. Esta vía municipal, que une el Camí Vell de Can Fornet con la Carretera EI-300, ha sido utilizada como trazado alternativo por muchos usuarios dada la gran carga de tráfico de la carretera hacia Eivissa y la carretera de Cala Llonga, motivo por el que la capa de rodadura se ha tenido que reemplazar. Al mismo tiempo, se ha aprovechado para instalar cuatro reductores de seguridad. Los trabajos también han incluido algunas mejoras en señalización y reparación de muros de piedra.
Las obras, que comenzaron a finales de abril, han tenido una duración de tres meses y fueron adjudicadas a Aglomerados Ibiza por casi 147.000 euros. En total, se ha renovado la capa de rodadura en unos 2.100 metros lineales del trazado, y allí donde los baches tenían mayor profundidad, se ha hecho una intervención más intensa, renovando todas las capas de aglomerado hasta llegar a la base.
Además de la mejora de seguridad inherente al cambio del firme, se ha aprovechado la actuación para crear cuatro badenes de obra con los que moderar la velocidad de circulación por el camino. Esta circunstancia es especialmente importante, ya que en el tramo de poco más de dos kilómetros en los que se actúa, existen unas 15 intersecciones con caminos vecinales o de particulares que sirven de entrada y salida para las viviendas, por lo que el exceso de velocidad en el camino principal es un factor importante de riesgo en las maniobras de incorporación a esta vía.
Como complemento a esta actuación, se ha renovado y mejorado la señalización, tanto horizontal como vertical; y se ha aprovechado para remozar algunos muros de piedra que presentaban roturas o problemas de estabilidad, de forma que también se ha mejorado la seguridad, al tiempo que también lo hace hecho la estética.
