El trabajo del departamento de Medio Ambiente ha permitido localizar a los cuatro responsables, tres particulares y un negocio de restauración, que la semana pasada fueron los responsables de un depósito masivo de residuos ocupando la vía pública en la calle Venda de Cas Serres de la población de Santa Gertrudis. Se da la circunstancia de que, en el momento del vertido, los contenedores se encontraban prácticamente mediada su capacidad. Ahora los responsables de esta infracción deberán abonar multas individuales de hasta 600 euros cada uno. En las últimas semanas, tras detectar un aumento de comportamientos incívicos de este tipo aunque de menor volumen, se han intensificado las labores inspectoras por parte de los celadores municipales, iniciando una quincena de expedientes sancionadores en lo que va de julio.
Los hechos ocurrieron en la tarde del pasado día 15 y fueron denunciados por un particular. Al lugar se desplazó personal del departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento que confirmaron la presencia de decenas de kilos de basura distribuidos en numerosas cajas, bolsas de basura y restos de obra depositados sobre la acera ocupando buena parte del paso de viandantes y provocando pequeños vertidos y depósitos de suciedad en el suelo. El personal municipal consiguió identificar a tres particulares y a un negocio de la zona, a los que se procedió a visitar para levantar un Acta de Denuncia.
El depósito indiscriminado de restos junto a los contenedores es una práctica sancionada por la normativa municipal y cada año supone un sobrecoste en el servicio de limpieza y gestión de residuos de unos 200.000 euros al año dado que obliga a contar con vehículos y personal específico para su retirada ya que los camiones de basura deben mantener sus horarios para poder dar un servicio adecuado en todo el municipio. Según un estudio realizado el año pasado se estima en torno a las 1.000 toneladas de basura las que se recogen cada año por haber sido depositada junto a contenedores.
Riesgo ambiental
Los restos depositados de forma errónea pueden acabar esparcidos por el entorno, especialmente los papeles y plásticos ligeros, o filtrados en el suelo en el caso de líquidos por lo que una correcta gestión es imprescindible. Cabe recordar que la normativa no contempla el depósito de la basura junto a un contenedor en caso de que este esté lleno sino que es responsabilidad del ciudadano buscar otro con capacidad o almacenar los restos hasta que pueda depositarlos convenientemente. Si se da la circunstancia de que el contenedor esté lleno, el ciudadano puede generar una incidencia, poniendo a la administración en conocimiento, a través de la aplicación Línea Verde.
Determinados residuos deben llevarse a gestores especializados o hacer uso de las ‘deixalleries’ (se cuenta con dos fijas en el municipio, en Can Sansó –zona depuradora de Santa Eulària- y Ca na Palava) donde se pueden depositar ciertas cantidades de forma gratuita. Para incentivar el uso de estos puntos verdes el Ayuntamiento ha creado una bonificación en el recibo de gestión de residuos por el que los particulares pueden descontarse 20 euros de la tasa a pagar.
En el caso de los negocios, especialmente si son grandes productores, tienen la obligación de registrarse como tal, en el Departamento de Medio Ambiente, para poder disfrutar de un servicio de recogida específico para papel/ cartón, vidrio, envases ligeros, orgánica y rechazo.
