El Ayuntamiento hará una acera y paradas de autobús en los barrios de Can Ramon i sa Font
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Santa Eulària des Riu aprobó este jueves el proyecto para mejorar los servicios y las conexiones entre los barrios de sa Font y Can Ramon, un proyecto que incluye la realización de paradas de autobús a dos sentidos de circulación de la carretera de Cala Llonga y la implantación de un paso de cebra con semáforo en la zona de mayor visibilidad para reducir la peligrosidad para los vecinos que quieren cruzar entre los dos núcleos de población.
Los trabajos, adjudicados a Islasfalto, tendrán un coste de unos 338.600 euros; unos sueldos que forman parte del remanente generado al Consistorio gracias a la eficiencia en la gestión de sus recursos económicos. Una vez que se inicien los trabajos, los trabajos tienen una duración máxima prevista de tres meses, lo que supone que podrían estar listas para el próximo verano.
Tras meses de conversaciones con los propietarios de terrenos que podían estar afectados, el Ayuntamiento inició el año pasado los trámites para poder realizar este proyecto que persigue el objetivo principal de mejorar la seguridad para todos los usuarios de la vía , tanto peatones como conductores que han de entrar o salir a la mencionada carretera. Estamos hablando de dos barrios con población todo el año, si bien el barrio de sa Font cuenta con más tiendas y establecimientos comerciales, incluido un supermercado, lo que genera un gran movimiento entre las dos zonas. Igualmente, se aprovecha para hacer otras mejoras en cuestiones tales como la recogida de residuos o el soterramiento de tendidos.
El proyecto ha sido sometido a consultas al Consell Insular d'Eivissa, responsable de la vía, y se ha ejecutado tras meses previos de conversaciones con los propietarios de las parcelas afectadas ya que las actuaciones contemplan pequeñas cesiones a sus propiedades para dotar la vía de una acera en algunos tramos, de arcén en otros.
En concreto, se proyecto un nuevo vial peatonal para enlazar los dos barrios, con una anchura de dos metros y siempre elevado respecto a la carretera, para ofrecer más seguridad. Cuando el vial marche por zonas urbanizadas, éste será del tipo acera, mientras que a su paso por zonas forestal, será de un material más integrado en el entorno. En algunos tramos también se aprovechará para hacer un arcén de medio metro (ahora inexistente) que mejore la seguridad en la circulación de vehículos. El proyecto ordenará y regulará las entradas y salidas a la carretera desde las calles y viales adyacentes, garantizando los radios de giro y la visibilidad para evitar posibles accidentes.
La plataforma de la carretera, titularidad del Consejo, no se modificará pero se construirá un paso de peatón con semáforo. Se ubicará igualmente al punto más alto del tramo y situado entre las dos zonas. Se garantiza así su utilidad para los vecinos de los dos barrios y se dota de medidas de seguridad para reducir la inseguridad.
Además de estas actuaciones encaminadas a mejorar la seguridad (que, en este aspecto, se complementan con una nueva iluminación), también supondrá una mejora importante la creación de dos paradas de autobús situadas fuera del carril de paso de los vehículos. Así, por un paso, se evita el peligro de colisión con el autobús por parte de otros vehículos y se crea una zona segura y a cubierto para poder acceder o descender del transporte público.
Otras actuaciones menores son la instalación de papeleras, la creación de un paso enterrando para una futura conducción de abastecimiento de agua y el soterramiento de una línea eléctrica existente ahora mismo en la zona más forestal pegada a la carretera.