Los alcaldes de Santa Eulària des Riu, Vicent Marí; y Sant Joan de Labritja, Antoni Marí Marí 'Carraca'; han defendido hoy la necesidad de ejecutar lo antes posible el desdoblamiento de la parte inicial de la carretera de Santa Eulalia, hasta Can Clavos, para acabar con los problemas de seguridad y saturación que presenta esta vía y que afectan especialmente a los vecinos y visitantes de sus municipios. Ambos han coincidido en señalar el gran proceso participativo que ha precedido este proyecto, han remarcado el desprecio hacia esta participación popular que supone la nueva actitud del Consell Insular y se han declarado "engañados y defraudados" por la decisión de hacer una consulta, sobre la que los dos partidos que gobiernan la institución insular aún no se han puesto de acuerdo si será o no vinculante. Ambos ediles han adelantado que se convocarán plenos extraordinarios para que los representantes directos de los vecinos afectados declaren su postura respecto a la carretera y la consulta ahora convocada.
Los dos primeros ediles y miembros de sus respectivos equipos de Gobierno se han reunido esta mañana para fijar una postura común y denunciar esta "ruptura unilateral del consenso conseguido". "Estamos de acuerdo en que la palabra de los ciudadanos es sagrada pero, ¿no vale nada la palabra de toda la gente que se pronunció en este proceso, la de todos los vecinos consultados, la de los técnicos, la de las asociaciones y la de las instituciones que participamos? ¿Por qué no valen para nada los acuerdos de los plenos de los Ayuntamientos, que son la máxima representación de los ciudadanos?", se ha preguntado el representante de Santa Eulària. "En una consulta sobre este proyecto, creo que el peso importante debe ser el de la opinión de la gente de los pueblos afectados, que son los que necesitan esta reforma para su supervivencia", agregó su homólogo de Sant Joan.
Tanto Vicent Marí como 'Carraca' lamentaron que se empleen 6.000 euros de dinero público en hacer una encuesta "para contentar a las bases de uno de los dos partidos que gobiernan" y criticaron la debilidad del presidente del Consell Insular, Vicent Torres. "Es un teatro y un paripé", lamentó el alcalde de Santa Eulària, quien ha añadido que "una silla (en referencia a la necesidad del PSOE del apoyo de Podemos para poder gobernar) no puede hipotecar el futuro de dos municipios". "Si el presidente no sabe hacer valer ni siquiera los acuerdos que él mismo apoyó cuando era concejal en Santa Eulària y que llevaba en el programa electoral, que deje su lugar a alguien que sí lo sepa hacer", añadió Antoni Marí.
Los dos concejales han remarcado que no se oponen a hacer consultas en los proyectos nuevos, síen los que ya están cerrados y ampliamente consensuados. De hecho, como recuerda la propia presentación (página 6) hecha por el Consell Insular en su presentación colgada en la web de la institución (http://participacio.conselldeivissa.info/), el proyecto tuvo una amplia participación para llegar a unos mínimos aceptables para todas las partes.
Por último, ambos concejales han remarcado la falta de definición sobre qué pasará si el resultado de la consulta es contraria al proyecto y las incongruencias y declaraciones contrarias efectuadas entre miembros del PSOE y de Podemos. "No han explicado nada, sólo si este proyecto sí o este proyecto no; y si es que no, ¿hay alternativa?, ¿no se hará nada?, se perderá totalmente la financiación del Estado? ", se ha preguntado Vicent Marí.
